jueves, 15 de enero de 2009

RESURRECCIONES (15 de enero de 2009)

En cuanto remontabas un poco las pendientes, vislumbrabas desde las alturas una ciudad plagada de grúas, reflejo de los años dorados de la ley del más fuerte, la del ladrillo, que enriquecían desmedidamente a unos pocos y secuestraban las economías familiares por decenios. Pero la crisis está peinando nuestras crestas y la gallina de los huevos de oro, como ya advertían algunos, ha acabado exhausta. En cuanto el imperio ha exportado su crisis, ha dejado de poner. A la vez otros sectores, poderosos, regodeados en sus inquebrantables balances de resultados, sufren también la sacudida y todo se ha puesto patas arriba.

Con más memoria que vergüenza, resucitan al bueno de Keynes y aporrean la ventanilla estatal exigiendo que abran la caja de todos para sacarles del apuro. Las reglas prostituidas. Decían que el erario público no daba para pan y resulta que da para vino. Unos se frotan las manos, la mayoría se frota los ojos. Mientras tanto, aguardando a que las cuentas vuelvan a su cauce, cientos de miles de trabajadores se van a la calle, víctimas de la codicia ajena.

Desde la otra orilla rabian porque ya lo habían advertido. Durante años anduvieron desconcertados ante la supuesta victoria final del sistema que combatían y, por ende, huérfanos de renovados referentes ideológicos, pero ha llegado la hora de echar sobre la mesa el comodín que guardaron un poco avergonzados tras el descarte de 1991: Marx, quien ya previno sobre la avidez de las oligarquías y su convencimiento de que el sistema estaba preñado de la bicha que provocaría su autodestrucción.

A la espera de la cesárea, los viejos maestros parece que siguen dando lecciones a engreídos y complacientes. Pero por el momento las doctrinas no alimentan los estómagos y la legión de parados se levanta cada mañana sumida en una insoportable incertidumbre. El resto se palpa las ropas por lo que pueda venir. Y quienes se veían guapos en el espejo han descubierto que se les ha corrido el rimel.

1 comentarios:

Teresa dijo...

Chapó

(ahora sólo hace falta que lo lean los que se animaron a llevar crestas y a estar por encima de la ola)

Blogger Templates by OurBlogTemplates.com 2008